Marzo 2020.- Si bien el mundo de las ruedas es relacionado con lo masculino, son varias las mujeres que han hecho historia detrás del volante. En el caso de MG, son algunas de ellas las que destacaron en la marca del octágono y lograron cambiar el estigma de la presencia femenina en el mundo de las carreras, demostrando que se pueden desempeñar en todos los ámbitos que el automovilismo les pueda presentar.
Desde la fabricación de autos hasta rallies, pasando por las 24 horas de Le Mans, éstas fueron las pioneras que sacaron la cara por Morris Garages.
Fiona Leggate perteneció a las pocas mujeres que han participado en el campeonato Británico de Turismos, corriendo en un MG ZR y logrando pasarse en 2007 a la serie principal de carreras de sedanes en Gran Bretaña, el BTCC (Campeonato Británico de Turismos) y, aunque no logró dar todo su potencial debido a que el traspaso de MG coincidió con el cambio de fabricante, los fanáticos la siguen recordando por sus competencias.
Más atrás en la historia, Pat Moss, una de las pilotos de rally más exitosas, hizo campaña en su MG en el RAC Rally de 1955, conduciendo durante siete años para la compañía madre de Morris Garages, la British Motor Corporation, tiempo en el que ganó tres campeonatos. Además de su gran trayectoria en el rally, su nombre también resuena, ya que la inglesa también era hermana del famoso piloto, Stirling Moss.
La adrenalina de las carreras llegó hasta Jean Denton, cuando decidió acercarse todos los fines de semana a las pistas de carrera, ganando el Campeonato Británico de las Carreras Femeninas en 1967, título que mantuvo en 1968. Ese mismo año se transformaría en la única mujer en participar con un automóvil deportivo, un roadster MGB en el London Marathon Rally a Sydney, llegando a completar el circuito del evento en solitario. Al terminar la década, ya se le veía como una piloto profesional y su auto MGB ha sido restaurado por el MG Car Club del Reino Unido.
En 1935 un grupo de mujeres, llamadas “The Dancing Daughters”, hizo historia cuando ingresaron con un MG PA en las legendarias 24 horas de Le Mans. Así, Margaret Allen, Coleen Eaton, Doreen Evans, Bárbara Skinner, Joan Richmond y Barbara Simpson entraron a la carrera de mayor resistencia en el mundo a cargo de un trío de autos apoyadas por la leyenda de MG, George Eyston. Las tres duplas no solo lograron correr las 24 horas de carrera, sino que el único cambio mecánico que tuvieron que hacer fue el reemplazo de un foco de luz en uno de los autos.
Lejos del glamour de los automóviles y las carreras, cientos de mujeres entregaron de forma anónima sus habilidades al servicio de su país en los años 40’, integrándose a la línea de producción de la fábrica de MG en Abingdon. La fuerza laboral femenina integró todos los departamentos de la planta, jugando un papel clave al apoyar a las fuerzas aliadas, ayudando en la construcción no solo de vehículos, sino también motores para bombarderos, puntas de ala para aviones y fuselaje para estos mismos cuando MG prestó apoyo durante la Segunda Guerra Mundial.
Aunque no estuvieron en el frente, las mujeres de la fábrica de Abingdon, junto a tantas otras, cumplieron un rol vital al seguir manteniendo en pie la vida en las ciudades durante el conflicto armado.